La recuperación económica, la inflación, y políticas favorables al sector inmobiliario están convergiendo para impulsar los precios de las propiedades en Argentina en 2025. Tras años de desafíos económicos, el sector está experimentando un repunte que promete importantes cambios en el mercado inmobiliario.

 

Recuperación económica y crecimiento proyectado

El 2024 fue un año complejo para el sector de la construcción, con una caída cercana al 20%. Sin embargo, se proyecta una mejora del 10% en 2025, a medida que la actividad consolida los signos de recuperación observados durante el segundo semestre del año pasado. Esta recuperación se apoya en un aumento significativo de los créditos hipotecarios, una mejora de los salarios reales en dólares y una mayor demanda de viviendas.

 

Argentina sigue enfrentando tasas de inflación elevadas, que alcanzaron un 166% interanual en noviembre de 2024. Esto ha llevado a muchas personas a buscar activos tangibles, como propiedades, para proteger su patrimonio. Además, el Índice de Costo de Construcción alcanzó niveles récord en octubre de 2024, lo que resultó en un incremento estimado del 30% en los costos de construcción respecto al año anterior.

 

A pesar de esto, se espera que los costos de construcción en dólares no crezcan al mismo ritmo en 2025, gracias a la apertura a la importación de insumos y la apreciación del tipo de cambio. Estas dinámicas, combinadas con la recuperación de los salarios, indican que los precios de las propiedades podrían aumentar entre un 10% y un 20% en el año, consolidando el crecimiento promedio del 7% registrado en 2024.

 

Créditos hipotecarios y financiamiento

El mercado de créditos hipotecarios mostró un crecimiento real del 214% en los primeros 11 meses de 2024, con un fuerte impulso en el segundo semestre. Este dinamismo fue clave para el aumento en las operaciones de compra-venta de propiedades, especialmente en áreas como Buenos Aires y Córdoba, donde las escrituras crecieron un 40% y 30%, respectivamente.

 

No obstante, el aumento de las tasas de interés entre noviembre y diciembre de 2024 podría representar un desafío para el financiamiento. Por ejemplo, las tasas de los bancos públicos pasaron del 4,3% al 4,9%, mientras que las de los bancos privados nacionales subieron del 5,6% al 6,8%. Esto incrementó las cuotas de los créditos en un 5% y 10%, respectivamente.

 

A pesar de estas subidas, el acceso al crédito hipotecario sigue siendo viable gracias a un mejor índice de capacidad adquisitiva, derivado de la mejora en los ingresos reales en dólares frente al valor de las propiedades. Para 2025, se espera que el volumen de créditos hipotecarios alcance los 3.000 millones de dólares anuales, impulsando aún más el mercado inmobiliario.

 

Políticas gubernamentales e inversión extranjera

El gobierno argentino ha implementado políticas para fomentar la inversión en el sector, como la eliminación de impuestos a la venta de propiedades y la derogación de leyes de control de alquileres. Estas medidas han atraído tanto a compradores locales como internacionales, con un aumento del 31% en las ventas de propiedades al cierre de 2024.

 

Además, los tipos de cambio favorables han incentivado la entrada de capital extranjero, especialmente de países como Estados Unidos, España y los Países Bajos. Este flujo de inversiones ha aumentado la demanda y, en consecuencia, los precios.

 

El crecimiento poblacional y la rápida urbanización en ciudades como Buenos Aires están impulsando la demanda de viviendas modernas e infraestructura. Las mejoras urbanas no solo incrementan el valor de las propiedades, sino que también hacen que las oportunidades de inversión sean más atractivas para los compradores.

 

El mercado inmobiliario argentino se prepara para un 2025 de fuerte crecimiento en los precios de las propiedades. La inflación, el aumento de los costos de construcción, el dinamismo del crédito hipotecario y las políticas gubernamentales favorables son factores clave que están transformando el sector. Con una demanda cada vez mayor y un mercado en recuperación, aquellos interesados en comprar o invertir deberán entender estas dinámicas para aprovechar las oportunidades en un entorno competitivo y en constante evolución.